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Resulta una perogrullada decir que planificar un viaje a Portugal no supone el esfuerzo y la dedicación que requiere organizar una aventura en Japón, Tanzania o Australia. Sin embargo, existen una serie de consejos básicos que conviene tener en cuenta antes de empezar a explorar el país vecino. Tanto si hablamos de una escapada de finde de semana o una estancia más prolongada, no hay que dar por supuesto nada ni tomarnos el viaje como si nos moviéramos por nuestro mismo país. Para despejar dudas y aclarar todo tipo de cuestiones, vamos a hacer un repaso por las recomendaciones fundamentales para organizar un viaje a Portugal en 2023. ¡Acompáñanos!
Todo lo que necesitas para viajar a Portugal en nueve pasos
Aunque es un destino muy popular y conocido por la mayor parte de viajeros españoles, Portugal sigue suscitando algunas preguntas y ciertas curiosidades. Te respondemos a todo aquello que te estás planteado a la hora de preparar tu viaje a Portugal.
Documentación para entrar en Portugal
Si el viaje a Portugal se realiza desde España, es suficiente con llevar el DNI en vigor. Estamos dentro de la Unión Europea y del espacio Schengen, por lo que la libertad de tránsito es total. Como es lógico tampoco es obligatoria ninguna vacuna. En el caso de someterse a algún control fronterizo aleatorio hay que tener en cuenta que la legislación portuguesa es muy restrictiva en cuanto al transporte de objetos de defensa tales como grandes navajas, pistolas eléctricas, espráis de pimienta o palos.
Sanidad en Portugal ¿Es necesario un seguro de viaje?
Hace algunos años el concepto ‘seguro de viaje’ se circunscribía a aquellas espadas a países que no pertenecen a la Unión Europea y donde la sanidad tenía un coste muy elevado. Sin embargo, contratar un seguro de viaje se ha vuelto un imprescindible también cuando se hacen desplazamientos más cercanos. Obviamente resultaría absurdo obtener una póliza para una escapada de fin de semana a Oporto o Lisboa, pero si viajamos a las islas Azores o Madeira, tenemos intención de realizar deportes de aventura o pretendemos hacer un recorrido más amplio por el país, es más que aconsejable. Todo lo relacionado con pérdidas de equipaje, robos, asistencia legal o desplazamiento de familiares en caso de enfermedad, está cubierto en pólizas como la que nosotros siempre contratamos con la compañía Iati. Además, por ser nuestro lector tienes un 5 por ciento de descuento a la hora de contratar el seguro que más se adapte a tu viaje.
En lo que se refiere exclusivamente al capítulo sanitario, la asistencia en Portugal para un ciudadano español está cubierta con la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE). Este documento se solicita de forma gratuita en esta página web y en unos días llega a nuestro buzón. Hay que percatarse de que esté en vigor y de esta manera nos brindarán asistencia gratuita en cualquiera de los hospitales públicos portugueses.
Mejor época para viajar a Portugal
Portugal cuenta con un clima mediterráneo que varía de forma notable en función de la zona en la que nos encontremos.
Por ejemplo, la región de Oporto y Norte goza de temperaturas suaves durante todo el año. Los inviernos son lluviosos, pero no demasiado fríos, mientras que el verano es más seco y no demasiado cálido. La primavera y el verano son dos épocas muy buenas para visitarla. Se trata de un dibujo muy general, ya que dentro de esta región hay zonas muy diferentes en lo que a climatología se refiere. La Terra Fria Transmontana tiene por ejemplo inviernos muy fríos y prolongados (es popular el dicho de que hay nueve meses de invierno y tres de infierno), mientras el valle del Duero posee un microclima mediterráneo con veranos muy cálidos y temperaturas suaves el resto del año.
La Región Centro también tiene notables diferencias entre el interior y la costa. La Serra da Estrela tiene por ejemplo inviernos fríos, lluviosos y con nubosidad y veranos muy cálidos, secos y cortos. Mientras, en la fachada Atlántica nos encontramos con inviernos lluviosos, peor no demasiado fríos, y veranos secos con temperaturas suaves con no suelen pasar de los 23-25 grados.
En la Región de Lisboa nos encontramos con inviernos húmedos, pero con temperaturas agradables que rondan los 10ºC. En verano el calor suele hacer acto de presencia, pero no es demasiado agobiante. Es la época más seca y soleada.
En el Alentejo existe clima mediterráneo con inviernos poco lluviosos y fríos y veranos secos con temperaturas altas. Los valores son más constantes en la costa y existen más variaciones en el interior.
El Algarve, la región más ‘playera’ de Portugal nos depara un clima muy agradable y mediterráneo con temperaturas muy constantes durante todo el año. Los inviernos son suaves y los veranos cálidos. Se registran pocas precipitaciones durante todo el año. La temperatura del mar no es muy elevada, por lo que resulta mucho más cómodo darse un chapuzón al final del verano.
En cuanto a las islas, destacar que Madeira tiene un clima similar al de Canarias, pero con temperaturas un tanto más bajas en invierno. El centro montañoso de la isla principal es más lluvioso, mientras la zona de costa, especialmente en el sur, es seca. Es agradable visitar Madeira en verano porque el termómetro no suele superar los 25ºC, pero también en otoño y primavera ya que el mercurio no acostumbra a bajar de los 19ºC. Por su parte, el archipiélago de las Azores es mucho más lluvioso. Salvo los meses de verano, donde también se puede dar precipitaciones, el resto del año las lluvias son abundantes. Las temperaturas son suaves y constantes con máximas que no suelen superar los 22ºC y mínimas que no bajan de los 15-16ºC.
Volar a Portugal, sus tres aeropuertos
Portugal cuenta con tres aeropuertos internacionales que cuentan con conexiones estables con las principales capitales europeas. Son los de:
- Oporto
- Lisboa
- Faro
Todos estos aeropuertos están perfectamente conectados con el centro de las ciudades. En el caso de Oporto (E morada) y Lisboa (roja) existen líneas de metro que realiza este trayecto, mientras que en Faro se puede tomar el autobús de la línea 16.
Portugal tiene además cinco aeródromos en los que se pueden realizar vuelos internos gracias a la compañía Sevenair. Están ubicados en Bragança, Vila Real, Viseu, Cascais y Portimão.
Conducir en Portugal. Atención a sus peajes
La diferencia primordial de conducir en Portugal a hacerlo en España son los peajes electrónicos que se implantaron en la mayor parte de autovías hace más de una década. Se trata de un sistema polémico y confuso que obliga al viajero a hacer un trámite online o en algunos de los cajeros habilitados en los pasos fronterizos. No son peajes al uso en los que exista una cabina y unas barreras. Esos están reservados para las autopistas. De ahí que, más de diez años después, el desconcierto siga siendo la nota dominante para muchas de las personas que viajan a Portugal.
Para salir de dudas te recomendamos consultar nuestra guía completa sobre cómo pagar los peajes en Portugal en 2023. En ella resolvemos todas las dudas y cuestiones relativas a un sistema injusto y desproporcionado.
Qué ver en Portugal según los días de los que dispongas
Llegamos a la pregunta del millón: ¿cuántos días son necesarios para recorrer Portugal? Lo sentimos pero nos vemos incapaces de contestarla. Estamos hablando de un país más de 92.000 kilómetros cuadrados con dos archipiélagos en los que en cada uno de ellos podríamos pasar un mes tranquilamente. Por lo tanto recorrer el país luso al completo, incluyendo las islas y centrándose en lo fundamental, llevaría con total de seguridad casi dos meses. Al final no nos hemos resistido a contestar la pregunta del millón aunque resulte casi una temeridad.
Es mucho más práctico preguntaros a vosotros cuántos días tenéis disponibles para recorrer Portugal y cuáles son vuestros gustos y podríamos diseñaros un itinerario a medida sin ningún problema. Nuestro correo electrónico está disponible para ello.
Pero como os vamos a dar algunos consejos y propuestas para que os vayáis haciendo una idea. Por ejemplo, es posible recorrer Lisboa en un puente de tres días. Si además le añadimos Sintra y Azenhas do Mar habría que sumar otro día más. Si también queremos incorporar Setúbal, Comporta y Caparica, mínimo dos días habría que añadir.
Con Oporto pasa exactamente lo mismo. Es posible condensar las principales visitas en la capital del Douro en dos días (mejor tres para ir más holgados). A Aveiro se le puede dedicar otra jornada y a Braga y Guimarães, un día a cada una.
Si entramos en itinerarios más segmentados por los gustos del viajero, los amantes de la naturaleza le pueden dedicar una semana al completo a Peneda-Gerês, el único parque nacional que ver en Portugal situado en el límite con la provincia de Ourense. Recorrer todo el Douro Vinhateiro desde la frontera con España hasta Oporto es una ruta de lo más atractiva para emplear también siete días. Tiempo que se puede prolongar para adentrarse en la región más auténtica de Portugal, Trás-os-Montes.
Un periplo por las Aldeias Históricas de Portugal ubicadas en las Beiras muy cerca de la Raya es otra propuesta de viaje de una semana para los aficionados a la historia y los pueblos medievales. Un itinerario que se puede completar con otro de los enclaves naturales más notables que visitar en Portugal, la Serra da Estrela.
Siete como mínimo también daría de sí una ruta por el Alentejo con paradas imprescindibles como Évora, Vila Viçosa, Monsaraz, Estremoz, Marvão… Idéntico tiempo sería interesante dedicarle al Algarve aprovechando la fantástica calidad de sus playas y sus rutas costeras.
Y finalmente otras dos rutas interesantes de unos cinco días cada una podrían tener como objetivo, por un lado, enclaves como Nazaré, Peniche, Óbidos con los monasterios de Alcobaça, Batalha y Tomar, además del santuario de Fátima. Y, por otro, la Costa Vicentina del Suroeste Alentejano entre Sines y el cabo de San Vicente.
Por supuesto no nos vamos a olvidar de los archipiélagos de Azores y Madeira, que pequeños países en sí mismo que darían en el primer caso para un viaje de un mes y en el segundo para unos quince o veinte días.
Presupuesto para viajar a Portugal
Una de las razones que ha convertido a Portugal en un destino turístico muy codiciado en Europa son sus precios. Aunque en las grandes ciudades y enclaves más visitados el coste de la vida es muy similar al que tenemos en España, todavía es posible encontrar reductos en los que comer y dormir a precios muy ajustados sin que por ello baje la calidad, más bien todo lo contrario.
En los restaurantes más tradicionales y auténticos en los que comen los propios portugueses es posible probar platos de bacalao o de carne a no más de 12-13 euros. Teniendo en cuenta que normalmente en Portugal las guarniciones son abundantes y el precio de los postres no se ha disparado como en España, es posible comer muy bien por unos 15-16 euros por persona e incluso por menos gracias a los conocidos como ‘pratos do dia’ que suelen estar más presentes los días de diario. Un dato a tener en cuenta es que en algunos de estos restaurantes solo aceptan efectivo.
También se nota mucho la diferencia con España en el momento del desayuno. Hay cafés solos por 0,60 céntimos y bollería por un euro en muchas cafeterías del interior.
El precio de los alojamientos es ligeramente inferior al de España, al igual que ocurre con el transporte público.
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Excursiones en Portugal
Para disfrutar al máximo de tu viaje a Portugal y conocer con más profundidad todo lo que ofrece el país os aconsejamos contratar alguna de las excursiones en español de Civitatis que gozan de gran popularidad. Además de los imprescindibles ‘free tour’ en ciudades como Lisboa y Oporto estas son las propuestas más atractivas:
- Excursión desde Lisboa a Sintra y Cascais más el Palacio da Pena
- Crucero de los seis puentes en Oporto
- Paseo en lancha por las cuevas de Benagil en el Algarve
- Excursión al Parque Nacional de Peneda-Gerês desde Braga
- Excursión a Guimarães y Braga
- Excursión a Aveiro y Costa Nova desde Oporto
- Excursión a Óbidos, Fátima y Nazaré desde Lisboa
Preguntas frecuentes que te debes hacer antes de viajar a Portugal
Para acabar esta guía completa con todo lo que necesitas para viajar a Portugal vamos a responder a algunas preguntas que probablemente te hagas si nunca has puesto un pie en el país vecino.
¿Qué horarios para comer tienen los portugueses?
Portugal continental y el archipiélago de Madeira tienen el mismo horario que las Islas Canarias (UTC+0), una hora menos que en España. Por su parte, las islas Azores pertenecen a la zona horaria UTC-1, por lo que son dos horas menos que en España. Sus costumbres en lo que se refiere a los horarios de las comidas y de las cenas son más similares a los países del centro y norte de Europa que a los del Mediterráneo. Suelen empezar a comer a las 12:00 horas y cenar a partir de las 19:00 horas. Más allá de las 15:00 horas y de las 22:00 horas es muy complicado que te sirvan.
¿Hay que dar propina?
Después de preguntar a varios portugueses, la opinión generalizada es que las propinas no están demasiado extendidas en el país. Ocurre como en España, cuando has tenido buen servicio en un restaurante puedes dejar una pequeña cantidad a modo de reconocimiento. Unos dos euros, por ejemplo, en una comida de 15 y 18 euros por persona, es una buena propina.
¿Es seguro Portugal?
Portugal es uno de los países más seguros del mundo. En 2020 ocupó el tercer lugar en esta lista solo por detrás de Islandia y Nueva Zelanda. En nuestros numerosos viajes que hemos hecho a Portugal jamás hemos tenido ni el más mínimo incidente. Obviamente hay que tener ciertas precauciones cuando cae la noche en determinados barrios de grandes ciudades como Lisboa u Oporto. Peor nada extraordinario o preocupante. El clima general es de una absoluta seguridad.
¿Hay ‘roaming’ en Portugal?
Sí. Se trata de un país de la Unión Europea donde se aplican las mismas tarifas que si usamos el teléfono móvil en España.
¿Cómo son los portugueses?
Nuestra experiencia con ellos no puede ser más satisfactoria. Tranquilos, amables, cercanos y agradecidos. Se afanan por hablarte en español aunque solo lo chapurreen y procuran siempre que estés cómodo y a gusto en sus negocios. Especialmente destacado es el carácter de las personas que viven en el medio rural, donde se aprecia una cautivadora bondad.